Se identifica cuando veo un nuevo cielo y una nueva tierra, debemos comprender que el cielo no es un lugar, sino que es un plano interior de la conciencia, el nuevo cielo es el florecimiento de un estado transformador de la conciencia humana y la nueva tierra es su proyección en el plano terrestre, El hombre hizo a dios a su imagen y semejanza lo eterno, lo infinito y lo innombrable se redujo a un ídolo mental, al cual había que venerar y en el cual había que creer como mi Dios o nuestro Dios, sin embargo es poco probable que podamos percibirlo a menos de que hayamos podido aunque sea vislumbrar esa verdad en nuestro interior, A lo largo de la historia han existido seres que han experimentado el cambio de conciencia y han reconocido en su interior aquello hacia lo cual apuntan todos los estamentos, eliminaron una a una todas las capas sofocantes de la conceptualización y las estructuras de los credos mentales, fue a través de estos seres que las religiones recuperaron el poder transformador de las enseñanzas, originales, la urgencia de transformar el ego del estado actual de la humanidad, para el ego tener es lo mismo que ser, lo correcto es: “EXISTO, LUEGO PIENSO”,
Con la tierra todo está conectado entre si también está conectada con la fuente de la vida de la cual provino, el ego es la identificación con la forma de pensamientos principalmente, no con los sentidos que son con lo que nos proporciona el sentido del ser, cuando estos desaparece nos arrebatan las formas con las cuales nos hemos edificado, cuando el ego se derrumba es el triunfo sobre los sentidos, El despertar es un cambio de conciencia consistente en el divorcio entre los sentidos y la razón, es un proceso en el cual el nuevo estado de conciencia toma posesión gradualmente del ego, transformando la personalidad convirtiéndose así en la parte fundamental, la espiritual carente de mortificaciones y sometimientos, se conoce realmente la verdad , la que nos hará libres, en lugar de permanecer perdidos en nuestros pensamientos, Cuando despertamos reconocemos que somos el observador consciente, la parte esencial del despertar consiste en reconocer la mecánica del ego, o no podrás reconocerlo y caerás en el error de identificarte con él una y otra vez, eso significa que el ego se apodera de ti y fingirá ser tu, Ahora cuando reconozcas tu inconsciencia será el surgimiento de tu despertar a tu ser más elevado, el que hará posible ese reconocimiento, Es posible vencer la lucha contra el ego al reconocer la propia oscuridad que se lleva dentro lo único que falta es la luz de la conciencia y tu y yo somos esa luz que se lleva dentro del corazón, la alegría de ser es la única felicidad que no se puede lograr a través de la forma es decir de las posesiones económicas y materiales, los logros, las personas o los sucesos, la alegría de “SER Y ESTAR” llega o emana de nuestro interior, del alma por lo tanto es una con nuestra esencia,
La ilusión del ser es decir el “yo” encierra a la vez el mayor error y la verdad más profunda, dependiendo de la manera como se utilice, la palabra “yo” encierra el error primordial, una percepción equivocada de lo que somos, un falso sentido de identidad eso es el ego, una vez sucedido el despertar continuamos hablando del “yo” pero con una noción emanada de un plano más elevado que es nuestro ser interior, El ego no sabe que nuestra única oportunidad para estar en paz es en el aquí y en el ahora, la pregunta es: ¿cómo podemos alcanzar la paz ahora? haciendo la paz consigo mismo en el momento presente, Así construiremos nuestro futuro inmediato para conformar la “nueva humanidad” en el momento presente es el campo en el cual transcurre el juego de la vida, hay cuatro palabras en el cual se encierra el secreto del arte de vivir el secreto del éxito y la felicidad uno con la vida,
- ser uno con la vida significa ser uno con el ahora donde reina el respeto hacia toda forma de vida y hacia todos, entonces nos damos cuenta de que no vivimos la vida, sino que esta nos vive, la vida es la bailarina y nosotros somos los danzantes, Cuando las formas que nos rodean mueren se aproxima la muerte del ego, empieza a surgir nuestro sentido del ser, es decir el “yo soy uno con el universo” se libera de su confusión con la forma: el espíritu vuela libre su prisión material, por ende reconocemos que nuestra identidad esencia es imperfecta, reconocemos que nuestra verdadera identidad es la divinidad que llevamos dentro, no aquellas cosas con las cuales se había identificado la conciencia a través del ego, esa es la paz de dios, la verdad ultima de lo que somos no está en decir: “yo soy esto o aquello” sino en decir: “YO SOY, LO QUE YO SOY”
AUTOR ECKHART TOLLE
