DIVINIDAD FEMENINA

Volveremos a lo sagrado, todo será bendito y enaltecido, La naturaleza y sus elementales serán únicos y se manifestaran a todos los seres en amor, nos purificaran y tendrán conciencia de luz, Nada podrá ser menor que el otro, todo en igualdad, será el principio del respeto y el amor total Y los seres mágicos, los animales y los humanos viviremos en total equilibrio en paz y armonía, Nada volverá a ser como antes, pues la conciencia abarcara las mentes que estaban en desequilibrio y surgirá el balance en equidad, La humanidad dará las gracias a nuestro Dios verdadero, será el reconocimiento, que Dios es más femenino, pues es puro amor que nos purifica y perdona en sencillez, Toda la luz, el agua, la tierra, el fuego serán la creación del amor, Los cisnes mágicos y los unicornios los podremos ven en su magnificencia, pues cuando aprendemos a guiarnos por nuestro corazón, se rompen muchos velos que nos distorsionaban el poder de crear e imaginar lo real, El nuevo sol saldrá, será un sol renovado, su luz será distinta, sus multicolores nos alimentara de sabiduría, su aura será la permanencia de una padre en protección y surgimiento de una nueva creación, guiada solamente por el amor redentor, Nuestros hermanos mayores llegaran a guiarnos y enseñarnos sus alegres sinfonías de amor, sus canticos y su energía será el alumbramiento a la paz de la creación, sus naves saldrán de lo profundo de la tierra, que siempre estuvieron con nosotros, solo que nos faltó sentir y profundizar en nuestros corazones,
El universo se unirá a la tierra, el cielo se acercara y nos dejara ver su mil formas de creación, lo verdaderamente real, en el cual con nuestras palabras formaremos diferentes figuras y los cielos se abrirán y lo desconocido llegara, Todo esto se dará a los seres que amen con totalidad confianza, sin dudar, sin mentir a sí mismos y mucho menos a los demás,

Nuestra Madre Divina será el ser más sabio y admirado, pues en ella vivimos y siempre hemos vivido, sus mándalas, canticos de amor, nos colmaran de luz, su energía la sentiremos en los corazones nobles, humildes y sencillos, pues en esta era la divinidad femenina será la guía y el honor por tan arduo trabajo en la tierra, Lo masculino encontrara su equilibrio con lo femenino, allí se formara el verdadero complemento que tanto tiempo se había buscado, el yin yang será uno y estos divinos masculinos se tornaran más femeninos, pues el corazón guía, ennoblece nuestro sentir y así llegara la paz y el amor a la tierra, El hombre empezar a concientizarse del verdadero papel femenino que por tanto tiempo ha sido acción en la tierra en humildad y sencillez, La mente del hombre se abrirá para dar paso al corazón, donde solo la luz y el amor lo gobernaran, Allí será la punta de la flecha de oro, la Madre Divina entrara en la conciencia para renovar los cuerpos, el ADN, los códigos y la matriz dadora de vida, Allí será el icono y el conocimiento de la verdadera Madre renovando y así renaciendo el nuevo hombre, la verdadera divinidad masculina,

Benditos los hombres que logren este divino premio, magnificencia, poder y honor, serán los caballeros dorados, hombre solares, los defensores de la divinidad femenina que fue ocultada pero no olvidada, Las divinas mujeres doncellas, ancianas, hadas, dadoras de vida, en amplitud de amor, cada una será la Diosa amada, guiadora hacia las nuevas generaciones de luz, será cada una maestras de luz, para con su sabiduría de amor, guiar a toda la comunidad en libertad hacia una nueva era de luz, donde brillara cada vez más con asombro pues lo que nos espera es la felicidad, alegría, danzas y arte de amor, La Madre Tierra, Gaia, será reconocida como la mujer divina, gracias a este ser divino, millones de seres han evolucionado, será la reina de los cielos y en ella se encuentra la verdadera sabiduría, su ejemplo de amor será la flecha de bronce que iluminara la alegría del sentir y el verdadero saber de los sabios, Todo renacerá en la tierra y así seguiremos evolucionando con sus hijos emanando luz y amor,
Por, Maita Kanta, fundación la ascensión de la divinidad femenina hacia una nueva era de luz