NUNCA DUDES DEL AMOR


Nunca dudes en dar amor, ya sea que vaya en una sonrisa, en un "gracias", en una mirada, en un apretón de manos, Amor que vaya en un "¿como estas?", una pregunta que sea sincera y que si va acompañada de amor espera la respuesta y comprende, Nunca dudes en ayudar el desanimado, en darle una palabra de aliento, en darle fuerzas para seguir avanzando, Porque no todo en la vida es color rosa, aunque quisiéramos y esto que llamamos vida, es lo que nos mantiene una vez en lo alto de la montaña, gritando con júbilo las victorias y alegrías y al otro día nos hace pasar por el valle de las sombras donde todo está oscuro Y es allí cuando debes encender la luz por tu compañero, brindándole todo el amor que llevas dentro, Ten vergüenza de criticar, de juzgar, de enojarte sin sentido, de abandonar un amigo... pero nunca te avergüences de decir un "te quiero mucho", quizá no sepas lo importante que pueda ser para la otra persona, Responde los mensajes, los mails, las llamadas, acude al amigo ausente, en el ciber espacio, porque no sabemos que puede estar sucediéndole en otro punto del planeta donde esté, Recuerda que no vas a empobrecerte por dar cariño, porque el amor no se resta, se multiplica, porque un gesto de amor, siempre hace feliz a alguien, Nunca dejes a tus amigos y no te olvides de los sedientos de amor, esos que con solo una gotita, con un "hola, como estas" ya aligeras su carga, Disfruten de este hermoso día que Dios nos regala, Los quiero mucho, A/D
Selamat Gajun, Selamat Ja, Sé Uno, Sé en Alegría, Cuida tus pensamientos porque se volverán palabras, cuida tus palabras porque se volverán actos, cuida tus actos porque se harán costumbre, cuida tus costumbres porque formaran tu carácter, cuida tu carácter porque formara tu destino y tu destino será tu vida, Cada vez descubrimos que nos enredamos más en la red de nuestra propia inconsciencia, al dar libertad de creación a través de nuestra palabra, sin dimensionar las consecuencias que ello tiene, Hay que hacer la salvedad que no es tarea fácil pero vale la pena comenzar este trabajo, perseverando en él y reiniciando con mayor fortaleza cada vez que detectamos que recaemos en el error, Yan Yholea